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“El Comercio Justo y el Transporte de los Alimentos”


Fairtrade acaba de publicar este nuevo dossier que pone de relieve que la sostenibilidad y la importación de alimentos no tienen por qué estar reñidos, sobre todo cuando se trata  de alimentos que provienen de países en vías de desarrollo  y en cuya producción se han respetado las personas y el medio ambiente. El análisis contiene ejemplos concretos que llevan a la conclusión de que los kilómetros que cada producto recorre en transporte influyen, pero no son el indicador más  importante para valorar el grado de sostenibilidad de un alimento.
Portada Dossier Comercio Justo y el transporte de los alimentosEl Comercio Justo es un movimiento social con la misión de fomentar el desarrollo en el Sur a través de relaciones comerciales más equitativas. Fairtrade es la certificación de producto que garantiza que estos han sido producidos y comercializados acorde a los estándares internacionales de Comercio Justo elaborados por Fairtrade International.

El Comercio Justo ha demostrado ser una herramienta muy eficaz a la hora de fomentar el desarrollo rural y la agricultura sostenible (más información y datos por ejemplo en el reciente estudio internacional realizado por el instituto CEVAL). La mayor parte de los productos de Comercio Justo proviene de Cooperativas de Pequeños Productores. Sus miembros trabajan sus tierras de forma tradicional, a la vez que incorporan nuevos conocimientos de agricultura sostenible y amigable con el medio ambiente haciendo un uso racional del agua, de la energía y de los fertilizantes. Los pequeños productores a no suelen usar métodos de agricultura industrial intensiva. Las condiciones climatológicas en los que se cultivan los productos de Comercio Justo son además normalmente más adecuadas y  propicias para el cultivo agrícola que en el norte de Europa dónde la falta de horas de sol se compensa con el uso intensivo de energía eléctrica y de fertilizantes.

El clima, la forma de cultivo, el uso de métodos tradicionales, el cultivo en pequeñas parcelas etc. son factores que favorecen una huella de carbono baja en la producción de muchos productos de Comercio Justo. A ello hay que añadir la importancia social y económica que la venta de estos productos tiene para los productores y sus comunidades, y para el desarrollo de regiones enteras.

Frente a estas ventajas en cuanto a la huella de carbono en la producción, el CO2 emitido por el transporte es responsable de una parte pequeña de la huella de carbono en total. Por ello la suposición “producto de cerca equivale a menos CO2” no suele ser cierta, ya que no tiene en cuenta ni las condiciones de producción, ni el procesamiento, ni el embalaje, ni el punto de venta. Y a la vez  es una ecuación muy dañina para los productores en países en vías de desarrollo para los que la exportación de sus productos en condiciones de Comercio Justo es una oportunidad de desarrollo y una forma de salir de la pobreza.

Acceder al dossier completo aquí.
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